En el valle de San Luis, los cultivos forrajeros, en los últimos meses han tenido buena aceptación y un mercado en california Estados Unidos, donde prácticamente toda la producción de los mimos (un 90 por ciento) se ha ido para ese lugar.
El jefe del Distrito de Desarrollo Rural (DDR) Luis Cervantes Sandoval, informó que la producción de San Luis y de Mexicali, la mayor parte se ha ido a California.
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“Varios productores han optado por sembrar todo tipo de forrajes, desde sorgo, alfalfa, sudan, que sirven para alimento de ganado, es más, hasta pacas de paja se han llevado y han conseguido buena aceptación, vendiéndose muy bien”.
Dijo que el sorgo forrajero o zacate sudan se establecieron 646 has el ciclo pasado, producción promedio de pacas por hectárea.
Expresó que en este ciclo van sembradas 400 hectáreas de avena forrajera, lo que ha sido una cosecha muy buena.
Mencionó que tanto el sorgo como la alfalfa son forrajes muy buenos, por lo que los productores optan por cultivar esos productos.
¿Qué son?
Las plantas forrajeras, o simplemente el forraje, son una especie de plantas o una mezcla de plantas, cultivadas por sus partes vegetativas (hojas, tallos eventualmente raíces), con la exclusión de los frutos y las semillas.
Son utilizadas en estado fresco, y son conservadas generalmente por secado con el fin de alimentar a los animales de la ganadería (bovinos, caprinos, cerdos, patos, gansos, conejos y otros).
Para hacer frente a las necesidades de los animales en todo tiempo, hay que conservar el forraje por diversos sistemas, tres métodos son utilizados principalmente el secado natural para hacer el heno; la deshidratación forraje deshidratado, en balas o granulado.
También ensilado, así como el sistema de conservación por la vía húmeda, basado en una fermentación ácida más o menos controlada, almacenando la materia húmeda densamente encerrada en un silo o en rollos en el caso de la paja y el heno.
Puede haber un riesgo de producir toxinas fúngicas o bacterianas, incluso de botulismo si quedan atrapados en los vegetales para ensilar animales tales como pequeños mamíferos o pájaros.
Generalmente el forraje lo constituyen plantas herbáceas, esencialmente gramíneas y secundariamente leguminosas.
El valor energético de los forrajes se suele dar en unidades forrajeras en comparación con el valor energético de un kilo de cebada.
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En Europa y en Estados Unidos, los forrajes que se dan a los animales rumiantes son a menudo cultivados en forma de pastos, permanentes o temporales.
El consumo de forraje se hace entonces directamente por pastoreo durante la estación de crecimiento de la hierba, también puede distribuirse a los animales estabulados.