Empresas datileras de la región estudian la posibilidad de usar drones para polinizar las palmas datileras, que es una tecnología que usan comúnmente en el Medio Oriente y que abarataría los costos en el valle.
El investigador de la Universidad Estatal de Sonora (UES) Ricardo Salomón Torres, lo más caro del dátil, es la polinización y la cosecha del mismo, debido a la cantidad de personal que se ocupa para esos procesos.
“Lo que hace falta, es que los agricultores le tengan confianza a ese método, incluso, en la universidad hicimos algunos experimentos de polinización líquida, pero con aspersores manuales, y funcionó, pero si tienes un dron, te puede ayudar a ahorrar mucho dinero, en mano de obra, no dañarían la planta y sería más rápida la polinización”.
Agregó que los ahorros pueden ser, de por lo menos un 50 por ciento o más, debido a que no se ocupa tanta mano de obra, solo el operador del dron y quienes se encargan de recargar el bidón de polen. Dijo que, para hacer la labor de polinización en una hectárea (cada una tiene 156 palmas), se ocuparían por lo menos de dos a tres personas.
“Lo caro es usar la grúa, en el proceso de polinización, se usan de tres a cuatro personas; la mano de obra cuesta mucho para los productores”.
Cabe señalar que lo más caro del proceso del dátil, son la polinización y la cosecha, debido a que se ocupa mucha gente; con un solo aparato se haría todo ese trabajo. Mencionó que la polinización debe ser de marzo a abril, porque la flor va abriendo, se requiere de tres a cuatro rondas para estar polinizando las nuevas flores que están saliendo.
Indicó que hay empresas locales como de Mexicali interesadas en tener esa tecnología, pero no se sabe la decisión de ella a ese respecto; cada dron de esas características tiene un costo aproximado de 300 mil pesos.