En la zona urbana de Mexicali se generan alrededor de 780 toneladas de basura al día, las cuales son transportadas primeramente al Centro de Transferencia de Mexicali para después ser llevadas al relleno sanitario ubicado en el ejido Hipólito Rentería. José Luis Piña Malagón, titular de la Dirección de Servicios Públicos Municipales, precisó que el servicio se otorga dos veces a la semana en 546 colonias de la mancha urbana, además de la delegación Progreso y González Ortega.
El funcionario resaltó que se presta el servicio a todas aquellas colonias y fraccionamientos que han sido debidamente entregadas al Ayuntamiento, de lo cual aseguró que no existe un rezago al corte de la entrevista, siendo alrededor de cuatro fraccionamientos los que están en proceso de entrega en la parte Oriente de la ciudad.
Existe la excepción, el fraccionamiento San Pedro Residencial, en donde ellos manejan su propio servicio privado de recolección de basura. La Dirección de Servicios Públicos cuenta con un parque vehicular que oscila entre las 60 y 70 unidades recolectoras de basura, cifra que cambia dependiendo de las descomposturas que vayan presentando.
Éstas son operadas durante tres turnos diarios por 400 trabajadores, utilizando entre 100 y 150 litros de diesel al día por cada unidad en los tres turnos.
Al ser recolectada la basura, ésta se lleva a la Unidad de Transferencia ubicada en la calzada Héctor Terán Terán al lado de la Laguna Xochimilco, en donde los pepenadores separan desechos como cartón, plástico y metal, mientras lo sobrante es trasladado al relleno sanitario ubicado en el ejido Hipólito Rentería, en el kilómetro 25 de la carretera Mexicali-San Felipe para su confinamiento total. “Nosotros nos llevamos el sobrante, la verdad es poco lo que sacan ellos de ahí, yo creo que un 10 ó 15% se quedarán ellos, el otro 90% nos lo llevamos nosotros posteriormente”. En el relleno sanitario la basura es confinada y compactada para ser enterrada en capas con material conocido como tucuruguay, de tal forma se evita que los desechos estén expuestos a la intemperie. Para lograr la compactación se utiliza un tractor Caterpillar D9, así como trascabos y dompes. “La dependencia no tiene que dejar nada expuesto para que no esté volando, no apeste”.
EN EL VALLE
Por su parte, el director de la Coordinación de Desarrollo Rural y Delegaciones, Andrés Vera Aguilar, informó que en el valle de Mexicali la instancia que encabeza es la encargada de brindarles el servicio de recolección de basura a los residentes de once de las catorce delegaciones, ya que en la delegación Progreso y González Ortega son atendidas por la Dirección de Servicios Públicos. El funcionario afirmó que en las delegaciones solo se presta el servicio en promedio cada siete días, por lo que no se ofrece el servicio dos veces por semana, excepto en Los Algodones y en San Felipe, al haber ahí una mayor concentración de personas al ser una zona turística. Estimó que en promedio se generan en el valle 180 toneladas de basura al día, lo cual incrementa dependiendo si es un día festivo o si se celebra algún festival en alguno de los poblados. La Coordinación de Desarrollo Rural y Delegaciones cuenta con 34 unidades en operación para ofrecer el servicio de recolección, de los cuales 30 se ubican en el valle y cuatro en San Felipe, mismas que son operadas por alrededor de 132 personas. Lo recolectado es depositado en distintos rellenos sanitarios, dependiendo de qué delegación se trate. En el relleno sanitario ubicado en el ejido Benito Juárez, cerca del Canal Pacífico se deposita la basura que se genera en el mismo ejido Benito Juárez, Hermosillo, Hechicera, Colonias Nuevas, Carranza, Delta, Guadalupe Victoria y Cerro Prieto.
En cambio lo generado en Los Algodones y Ciudad Morelos se depositan en un relleno que se ubica detrás del Panteón de Algodones. En el ejido Batáquez se depositan sus propios desechos, a 8 kilómetros adentro de esta misma demarcación y en San Felipe también se depositan sus propios desechos, a unos 8 kilómetros a la derecha de los Arcos de esta delegación turística. En cada uno de estos rellenos sanitarios laboran pepenadores, quienes en su mayoría buscan metal y cartón. Una vez que ellos ya segregaron lo que pueden reciclar, la basura es confinada de la misma manera en que lo hace la Dirección de Servicios Públicos, enterrando la basura en celdas y siendo tapada con maquinaria pesada en distintas capas.
