La crisis económica por la que atraviesa San Luis Río Colorado desde que comenzó la pandemia en marzo pasado afecta a todos los sectores de la población y el transporte público no es la excepción, ya que pocas unidades se encuentran en la calle prestando servicio.
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Entre la crisis de la pandemia y la época mala, económicamente hablando, de la ciudad, los conductores de “peseras” enfrentan otra vez la posibilidad de parar debido a que no obtienen lo mínimo indispensable para circular en las calles.
El dirigente de la Unión de Permisionarios, Jorge López Verduzco, informó que la situación es seria debido a que no hay pasaje para las unidades.
“Esto está solo, no sacamos ni para la gasolina, estamos trabajando una sola ruta y eso nos perjudica mucho, varios choferes se salieron porque no sacaban ni para la gasolina, menos para ellos”.
Agregó que lo que buscan es cuando menos ganar unos mil pesos, para al menos obtener recursos para ponerle combustible a la unidad y buscar que le quede un poco de efectivo al trabajador.
“Se gastan 100 pesos mínimo, para una vuelta completa hasta los Chula Vista y por ahora no ha podido ser así, se sacan una cantidad muy reducida y eso nos ha perjudicado”.
LA POSIBLE SOLUCIÓN
Dijo que lo que pudiera necesitarse es que algún gobierno (federal, estatal o municipal) les subsidie el combustible, aunque sea una parte, para seguir viviendo.
En cuanto a la posibilidad de unidades nuevas en la ciudad, la rechazó debido a que no durarían por las condiciones de las calles, aunque algunas han mejorado.
“Además, hay mucho transporte de personal, aparte mucha gente tiene autos ‘chocolate’, por eso el transporte urbano se va de pique; lo que sí podemos hacer es tener unidades en buen estado, pero nuevas, no se puede”.
Expresó que se necesitaría que el gobierno se haga cargo de los gastos, pero difícilmente va a querer participar en ello.
NO HAY CHOFERES
Por su parte, el delegado de Transporte del estado, Giovany Valtierra Herrera, indicó que la falta de choferes se deriva que durante el pasado paro varios de ellos tuvieron otro trabajo y muchos ya no regresaron a retomar las rutas de “peseras”, puesto que allá les iba mucho mejor.
“Hay algunos que son de la tercera edad y ya están muy mayores y ya no pueden estar manejando una jornada de 8 a 10 horas, es más riesgoso para ellos, es por eso que agarraron operadores”.
Expuso que otra razón es que no hay pasaje, pues la gente no utiliza mucho el transporte urbano, a eso le agregan todos los estudiantes que se supone regresan a clases, pero éstas serán en línea.
Por último, comentó que el pasaje ha decaído seriamente hasta 80%, lo que ha hecho que la mayor parte de las “peseras” se haya detenido.
Destacado: El problema es que las “peseras” se enfrentan a una doble crisis, no hay choferes y no hay pasaje, lo que les dificulta laborar normalmente, tuvieron que estar más de 3 meses parados y ahora piensan hacerlo de nuevo
