Señalización, que no tenga nada alrededor ni un árbol ni una fuente, ni un segundo piso, que indique la profundidad, que el cuarto de máquinas esté funcionando perfectamente, que la cloración sea la indicada y que no haya amiba libre, es lo que la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios en Estado de Sonora (Coesprisson) revisa en albercas públicas.
La jefa de la unidad con sede en San Luis Río Colorado, María Guadalupe Gallardo Romero, informó que es parte de Control Sanitario, supervisar el uso y el estado en el que se encuentran la albercas públicas, para evitar propagación de enfermedades y evitar accidentes a través de estas.
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Comentó que a los propietarios de albercas, como requisito para rentarlas se le está pidiendo que tengan actualizada su licencia de funcionamiento, la cual es indeterminada y aparte que renueven el curso que se imparte por esta dependencia cada dos años.
“Saca su licencia sanitaria, que ahora ya es indeterminada, la saca este 2023 y no se vuelve a molestar, porque antes era cada dos años renovar licencia, ahora ya no, ahora es indeterminada, lo que ellos deben de renovar es su curso”.
En cuanto a los requisitos que tiene que cumplir el propietario, para poder rentar un espacio de estos, además de los que ya se mencionaron tiene que mandar cada 15 días el agua a un laboratorio que se encuentra en el parque industrial, para identificar si está en mala calidad o no.
“El propietario tiene que enviar a analizar su agua en el laboratorio que tenemos en el parque industrial, eso es por parte del propietario”.
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Agregó que las albercas privadas no son parte de las revisiones de Control Sanitario, si no del dueño, pero que en caso de que se sorprenda rentándolas como negocio particular podrían ser llamados a tomar el curso y de hacer caso omiso sancionar al propietario.
En cuanto al cierre de albercas dijo que es en este mes de septiembre cuando normalmente se suspende el uso y renta de albercas por el evidente cambio de clima que se marca en estas fechas.