Luego del sismo de 7.2 de magnitud a la escala de Richter, que el pasado 2010 golpeó fuertemente al valle de San Luis Río Colorado y de Mexicali, una nueva colonia rural se formó, donde desde aquel entonces se agrupa gran parte de los damnificados al estrago de la naturaleza.
Se trata de la colonia Bicentenario, un asentamiento ubicado a un costado del poblado Luis B. Sánchez, donde el Gobierno Federal dotó de los servicios básicos y entregó 135 pequeñas casas de lámina a quienes lo perdieron todo por los efectos del sismo.
En una de las viviendas, desde meses después del temblor vive la señora Norma Alicia Franco Sandoval, quien dice, se llevó “el susto más fuerte de su vida”, al ver como la tierra de partía y su casa caía.
“Estaba cocinando cuando empezó a temblar, y se abrió la tierra y no podía ni caminar, nunca había visto eso, creí que se iba a acabar el mundo, fue tanta la impresión que me desmayé, cuando desperté vi que habíamos perdido todo”, expresó.
2010 Fue el año del sismo de 7.2 a la escala de Richter que devastó decenas de hogares en el valle sanluisino, dejándolos sin un techo en cuestión de segundos.
Como Norma Alicia, decenas de familias de la colonia Los olivos a la orilla de un canal de riego, se vieron en la necesidad de migrar a un poblado menos afectado por el sismo, muchos de ellos, a la mancha urbana de San Luis Río Colorado, según cuenta.
En el caso del señor Refugio Flores Laureano y su familia, quienes antes del sismo vivían en una casa levantada con adobe crudo, se vieron en la necesidad de moverse a la colonia formada para los damnificados, pues como la mayoría de éstos, se quedaron sin un techo donde vivir.
“Vimos como el suelo se partió en dos, como las parcelas se dividían, pero lo más impresionante fue ver caer nuestra casa, en cuestión de un segundo perdimos nuestro único patrimonio”, recordó.
Colonia Bicentenario
Los vecinos, la señora Norma Alicia y el señor Refugio, viven en los pie de casa, el cual consta de cocina, una recamara y un baño, que el gobierno les entregó al percatarse que fueron de los residentes del valle más afectados.
Sin embargo, luego de años, muchos de los que fueron beneficiados con estos espacios se han ido y han vendido el terreno por cantidades cortas.
Sin certeza jurídica
El total de las 135 viviendas creadas para los damnificados del sismo del pasado 2010 carece de un documento que les avale ser el residente, un propietario oficial de éstas, pues no se les ha entregado una escritura que les dé certeza jurídica del predio.
Así lo compartieron los vecinos de la colonia Bicentenario, al tener la inquietud de estar haciendo vida en un terreno del cual no han realizado el pago del predial, pues no existe un documento que les avale legalmente.
El vecino Francisco Javier Aguilar dijo que desde que aceptaron reubicarse en la colonia Bicentenario, han estado a la espera de los títulos de propiedad, sin embargo, gobiernos han pasado y no se les atiende en el tema.
135 Pie de casas fueron construidas por el gobierno federal para los damnificados por el sismo.
“No podemos decir que estas casas son de nosotros en realidad, porque no tenemos un papel que nos ampare, tenemos nada más los recibos de la luz y el agua con nuestro nombre, pero no un título, que es lo que hemos venido pidiendo a los gobiernos, que nos den certeza jurídica para nuestras familias”, comentó.
Al no tener certeza jurídica, hay quienes han optado por abaratar el predio y venderlo, otros que simplemente las han dejado al saberse en riesgo de que el gobierno las puede quitar en cualquier momento, lo que se ha vuelto un tema de inseguridad por el abandono de casas, contaron los vecinos.
Jornaleros
La gran mayoría de los damnificados ubicados en la colonia Bicentenario se dedican a las actividades de campo agrícola de los alrededores del poblado Luis B. Sánchez