Ayer, cientos de sanluisinos abarrotaron las iglesias locales con el fin de cumplir con el ritual de la colocación de ceniza, que marca el inicio de la Cuaresma, considerada la etapa más importante para la comunidad católica.
El padre Jean Paul Valenzuela Ibarra informó que el miércoles de ceniza marca el inicio de un encuentro, así como Jesucristo fue al desierto para encontrarse con Dios, de toparse con él.
“Él se dio cuenta que estaba por comenzar la preparación para lo que había venido a promover el reino de los cielos, pero, sobre todo, a morir para resucitar por nosotros, para que pudiéramos tener la salvación”.
Agregó que eso es lo que se está celebrado y se les pide a los feligreses que se dediquen a un tiempo de reflexión, de oración, de abstinencia y de misericordia, para entrar en ese estado de conversión.
Dijo que también es una forma de resucitar con Jesucristo en la Pascua, es decir, prepararse para ese tiempo del Señor.
Comentó que la Pascua es la fiesta más importante de la comunidad católica porque es el acto de amor de Jesús.
“Fue enviado para morir y resucitar por nosotros, porque ahí tenía la carga de todos los hombres, en lugar de que todos los humanos llevaran ese peso en la crucifixión; si no la hubiera, nosotros no estaríamos hablando de esto”.
Aclaró que no se le quita la importancia a la Navidad, pero la Pascua es la fiesta más importante, y con los Miércoles de Ceniza se inicia ese periodo.
“Con la imposición de ceniza, significa que morimos al pecado para vivir la gracia, cuando iniciaron con los bautismos de los judíos, lo que hacían era quitarse la ropa, la quemaban, se revolcaban y se iban a abañar, y de esa manera salían limpios”.