Con el aumento de las temperaturas climáticas se eleva también el número de pacientes que presentan problemas de salud relacionados con el extremo calor como son deshidrataciones, golpes de calor e insolación, padecimientos que el año pasado cobraron 2 vidas en esta ciudad.
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De acuerdo a lo informado por Alfredo Sánchez, médico epidemiólogo asignado a la Jurisdicción Sanitaria VI, desde que empezó a sentirse con más intensidad el calor en la ciudad al día de hoy, no se han registrado casos de pacientes con este tipo enfermedades ni muertes.
Sin embargo, la Secretaría de Salud de Sonora trabaja en acciones de orientación a la población para evitar deshidrataciones, insolaciones o golpes de calor, pues se prevé que conforme el termómetro suba, crecerán las posibilidades de que la gente resulte afectada.
“Es común que en estas fechas se presenten deshidrataciones, golpe de calor e incluso insolación, es muy importante prevenir o en su caso acudir ante los primeros síntomas al médico porque pueden llegar a ser mortales”, externó.
De las dos defunciones registradas en este municipio el año pasado, 1 fue por golpe de calor y la otra por insolación. Se recomienda a la población no exponerse al solar en las horas de mayor radiación, que es entre las 11:00 y las 17:00 horas, pero en caso de hacerlo, usar siempre bloqueador solar; elegir las primeras horas del día para llevar a cabo las actividades al aire libre y las deportivas; portar ropa de colores claros, de manga larga, además de ingerir abundantes líquidos, como mínimo dos litros diarios de agua simple, aun cuando no se tenga sed.