Guiada por el inmenso amor que le tiene a su hijo primogénito, Dolores Uriarte Gómez al enterarse que padecía cáncer buscó ayuda médica y tratamiento, lo cual contribuyó a salvarle la vida.
La madre de familia recordó que hace 9 años su esposo Víctor Manuel notó en su hijo Víktor Vladhimir la aparición de una “bolita” a un lado de la oreja, lo cual se les hizo extraño, pero lo dejaron pasar hasta que esa protuberancia empezó a crecer y el niño tuvo diarrea.
En ese momento, tomaron la decisión de ir a consulta médica al Centro de Salud Urbano de la Secretaría de Salud de Sonora, ya que están inscritos en el programa “Seguro Popular” y fue ahí donde se realizaron estudios clínicos y una biopsia que arrojó el diagnóstico de rabdomiosarcoma embrionario que es el cáncer de tejidos blandos.
Dolores Uriarte externó en el momento de recibir la mala noticia, se le vino el mundo encima, literalmente, pues por lo general cuando se escucha la palabra cáncer la mente lo asocia con muerte.
“Ese día fue muy difícil para nosotros como pareja y como familia, enterarnos de que el único hijo que teníamos, tuviera cáncer. Me sentí muy mal, pero gracias a Dios reaccioné pronto y no me quedé cruzada de brazos, busqué ayuda, toqué puertas para que atendieran a mi hijo y así fue, me ayudaron y ahora mi hijo está sano”, manifestó.