Theresa May darA? la batalla por el Brexit en su partido

Alberto Vidal

  · lunes 1 de octubre de 2018

P ARÍS, Francia. Con la miradapuesta el excanciller Boris Johnson, su principal rival dentro delPartido Conservador, la primera ministra británica Theresa Mayacusó a los críticos de su plan sobre el Brexit de“estar jugando con el futuro del país”.

Así, en una entrevista que publicó el Sunday Times,May mostró que está decidida a librar una batalla sincuartel contra el ala más dura del partido tory que encabezanBoris Johnson, el secretario de Medio Ambiente, Michel Gove; elexministro del Brexit, David Davis, y el influyente diputado JacobRees-Mogg.

“Somos el partido que empeñó su palabra sobrela forma en que serán gobernados los británicos. Yrespetamos la decisión que tomaron: salir de la UE y retomarel Ordertrandate generic name control de nuestro dinero, nuestras leyesy nuestras fronteras", escribió en el mensaje debienvenida a los delegados en el congreso del Partido Conservadorque se realiza en Birmingham.

Ese párrafo prefigura el discurso que pronunciará elmiércoles en la clausura del congreso tory para defender elllamado plan de Chequers, que constituye su base denegociación con Bruselas para definir las condiciones quemantendrá Gran Bretaña después que abandone laUnión Europea (UE), el 29 de marzo de 2019. El plan, quepropone la creación de un mercado común de bienes conequivalencia regulatoria, fue rechazado por“insuficiente” en la cumbre de la semana pasada enAustria y por Boris Johnson. El Consejo Europeo, órganoejecutivo de la UE, consideró que la solución propuestavulnera la integridad del mercado único y no resuelve elproblema de la frontera irlandesa.

En un artículo publicado el viernes en el diario TheTelegraph, Johnson lo calificó, por su parte, de“humillación moral e intelectual para elpaís". El excéntrico excanciller, que espera asestarun golpe definitivo a May para sucederla como primer ministro,redobló ayer sus ataques al calificar el plan de Chequers de"chiflado" y "totalmente grotesco".

Por esa razón, no se espera que la primera ministrabritánica modifique su propuesta durante el congreso para nodebilitar su posición ante el ala dura, estimó RobinPettitt, profesor de la Universidad Kingston de Londres.