A pesar de la dura situación por la que atraviesa el país (y el mundo) don Miguel Mariscal, un abuelito de San Luis Río Colorado, Sonora tenía claro su objetivo y ni el Covid-19 ni nada iba a detenerlo.
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Perrito vende peluches de sí mismo para pagar su cirugía
Fue así que su misión de llegar a Veracruz dio inicio y sin más que una carretilla en la llevaba sus pertenencias, emprendió su viaje.
Muchos dicen que fue suerte, otros que fue la bendición de Dios, pero don Miguel llegó a su destino, pero definitivamente no la tuvo fácil.
Afortunadamente, el abuelito se cruzó con buenas personas que no dudaron en tenderle la mano e incluso darle un “aventón”.
Gracias a estas personas se tiene documentado en fotos la gran aventura de don Miguel, tal vez sin las imágenes nadie lo creería, además también se le apoyó con una "Coperacha".
Hasta el momento se desconoce el motivo por el cual este valiente señor decidió viajar hasta el otro extremo del país o si tiene familiares en aquel lugar.
Lo que sí se sabe y se admira es su valentía y su determinación para lograr su objetivo., no hay lugar a duda que de ahora en adelante tendrá una increíble historia que contar.
Por ahora, el sonorense ya se encuentra en su destino, lugar donde seguramente está planeando realizar más de sus aventuras.