Si tienes picazón en alguna parte del cuerpo, puede que sea culpa de los ácaros que se ocultan en tu cama. Aunque la presencia de ácaros puede resultar alarmante, existen maneras de mantenerlos a raya para proteger nuestro hogar y alejarlos de los lugares donde se esconden.
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Los ácaros son unos insectos microscópicos pertenecientes a la familia de los arácnidos e invisibles al ojo humano, que encuentran su hábitat en cualquier objeto que esté revestido de tejidos que atraen el polvo.
Desde sillones, cortinas, almohadas, pero especialmente los colchones, ya que estos propician una humedad perfecta para su desarrollo, por lo que puedes estar tranquilamente dormido sin imaginarte que tu lugar de descanso está infestado de ácaros.
Para advertir la aparición de ácaros se debe estar atento a los siguientes síntomas:
• Picazón o comezón constante en alguna parte del cuerpo.
• Enrojecimiento y/o ardor en zonas del cuello y de la cara.
• Granitos o sarpullidos en la piel.
• Tos a la hora de ir a dormir.
• Fatiga y/o incomodidad al despertarte.
¿Cómo eliminar los ácaros de mi colchón?
Eliminar por completo a estos insectos es imposible, pues conviven con nosotros en el entorno. Lo que en realidad se busca es reducir el número de ácaros, y evitar dormir con el enemigo.
El bicarbonato es sin duda alguna el mejor aliado contra estos insectos. Solo basta con mezclarlo con aceites esenciales (de lavanda, canela, romero, o cualquiera que tengas a la mano), y espolvorear un poco sobre el colchón. Déjalo reposar por un par de horas y repite por el otro lado.
Una vez que haga efecto la mezcla, se recomienda pasar la aspiradora por la superficie varias veces para eliminar el exceso de bicarbonato así como a los ácaros.
De igual modo, una vez que se haya tratado el colchón también se debe lavar la ropa y accesorios de cama, pues ahí también se esconden.
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¿Se pueden prevenir?
Sí, con una limpieza constante, y cuidados cómo cambiar las sábanas regularmente, dándoles lavado al menos una vez a la semana y utilizar fundas para almohadas y protector de colchón de modo que al dormir la humedad de nuestros cuerpos no pase directamente al colchón.