La celebración de Halloween ha traspasado fronteras, edades y culturas, afianzándose como una de las festividades más populares del mundo, reuniendo a cientos de personas dentro de las tradiciones y costumbres que la propia festividad abarca.
Dentro de las tradiciones más populares y representativas de Halloween se podrían contar las decoraciones tétricas y llamativas en los hogares, las famosas fiestas de disfraces que han despertado la creatividad de todo tipo de personas en el mundo, además de quizás la costumbre más famosa del Halloween: el “Dulce o Travesura”, el pedir dulces de casa en casa durante la noche de brujas.
La tradición de pedir dulces en Halloween, conocida como "Trick-or-Treat" en inglés, tiene sus raíces en una mezcla de influencias culturales y supersticiones que se han desarrollado a lo largo del tiempo, las cuáles, te presentaremos a continuación.
Orígenes celtas
Halloween tiene sus raíces en la festividad celta de Samhain, que marcaba el final del verano y el comienzo del invierno. Se creía que durante la noche de Samhain, los espíritus y las almas de los difuntos regresaban a la Tierra. Para apaciguar a estos espíritus y evitar su ira, la gente dejaba ofrendas de alimentos y dulces fuera de sus puertas.
Tradiciones cristianas
La festividad de Halloween se superpuso con las festividades cristianas, como el Día de Todos los Santos y el Día de los Muertos. En estas festividades, la caridad y las ofrendas de alimentos a los pobres eran comunes, lo que también influyó en la tradición de dar dulces.
Evolución moderna
La costumbre de pedir dulces en Halloween se popularizó en América en el siglo XX. Se convirtió en una actividad lúdica en la que los niños se disfrazaban y visitaban casas vecinas, pidiendo dulces a cambio de no hacer travesuras (el "Trick" en Trick-or-Treat). La amenaza de hacer travesuras, aunque rara vez se cumple, recuerda la idea original de que los espíritus podrían causar problemas si no se les aplacaba con ofrendas.