El 5 de junio de 2009, la ciudad de Hermosillo, Sonora, fue testigo de una de las tragedias más devastadoras en la historia reciente de México: el incendio de la Guardería ABC. Han pasado 15 años desde aquel fatídico día en que las llamas arrasaron con la vida de 49 niños y dejaron a más de 70 heridos, un suceso que marcó para siempre a las familias afectadas y a toda la comunidad sonorense.
La guardería, subrogada por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), operaba en un edificio que no cumplía con los estándares de seguridad necesarios. La tragedia se desató debido a un incendio en una bodega contigua, que rápidamente se propagó a las instalaciones de la guardería. Las condiciones de seguridad eran precarias: puertas de emergencia bloqueadas, falta de extintores y un techo de material inflamable. Estas deficiencias impidieron una evacuación efectiva y segura de los menores.
El impacto de la tragedia fue inmenso. Familias enteras quedaron devastadas y el país entero exigió justicia. Se llevaron a cabo investigaciones que revelaron negligencia y corrupción en la concesión y supervisión de las guarderías subrogadas por el IMSS. A lo largo de estos años, los padres de las víctimas han luchado incansablemente por la justicia, enfrentándose a un sistema judicial lento y muchas veces indolente.
En estos 15 años, el dolor y la indignación no han disminuido. Los padres y familiares de los niños han formado asociaciones y han llevado su lucha a diferentes foros nacionales e internacionales, buscando que se reconozca la responsabilidad de los funcionarios y se tomen medidas para que una tragedia de esta magnitud no se repita. Su incansable labor ha derivado en algunas reformas a las leyes de protección civil y en la implementación de mayores controles de seguridad en las guarderías del país.
El aniversario de la tragedia de la Guardería ABC es un recordatorio de la importancia de la seguridad en los espacios destinados al cuidado infantil y de la necesidad de que las autoridades cumplan con su deber de proteger a los más vulnerables. A 15 años del incendio, el eco de las voces que claman justicia resuena con la misma fuerza, manteniendo viva la memoria de los 49 angelitos que hoy se conmemoran.
Esta trágica efeméride nos invita a reflexionar sobre la responsabilidad colectiva y la urgencia de fortalecer las medidas de prevención y respuesta ante emergencias. El compromiso de garantizar la seguridad de nuestros niños debe ser una prioridad innegociable, para que una tragedia como la de la Guardería ABC nunca vuelva a repetirse.
