Actualmente Luka Doncic es una de las figuras más populares de la NBA y el público lo admira. Dentro del mar de jerseys en la Arena Ciudad de México el de Doncic sobresale entre el público.
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El esloveno mostró agradecimiento por las muestras de cariño por parte de la afición que lo aclamaron al grito de ‘MVP, MVP‘ y se tomó un momento previo al partido para firmar algunos jerseys, tomarse fotos y chocar palmas con los seguidores.
En la duela, todo fue espectáculo, durante la presentación de Doncic, el público enloqueció cuando a unos segundos del arranque, el esloveno dijo con su mejor español: «Viva México wey».
Por el equipo de Detroit, los más coreados fueron Blake Griffin y Andre Drummond.
LOS MAVS CONQUISTARON LA CDMX
Sin duda alguna el espectáculo se lo llevó Luka Doncic, el estelar alero esloveno lideró la exhibición de los Mavericks de Dallas con una victoria contundente por 122-111 sobre los Pistones de Detroit.
La espectacularidad de la dupla europea formada por Luka Doncic y Kristaps Porzingis fue demasiado para unos pupilos de Dwane Casey que fueron cediendo terreno con el pasar de los minutos.
En un comienzo, se enfrascaron en una batalla ofensiva con múltiples canastas a larga distancia que acabó con un parcial de 34-29 en el primer episodio. Detroit cambió el ritmo de juego, involucró más a Derrick Rose y el MVP del 2011 tomó el control de las acciones para tratar de ejercer el juego en la pintura con el imponente Andre Drummond. El centro, líder de la liga en rebotes, anotó 20 puntos en la primera mitad para mantener a su equipo en la contienda.
El juego fluido de los Mavericks apenas logró sacar una ventaja de tres tantos en la primera mitad (51-48), pero en el complemento el guión volvió a la normalidad.
Los Pistones se negaban a tirar la toalla y lograron acortar la diferencia a únicamente nueve tantos, pero Doncic se encargó de esfumar sus opciones.
Más de 20 mil aficionados disfrutaron del partido número 29 de la NBA en México y de la nueva sensación de la liga, que se despidió entre aplausos y al grito del «MVP».
Con información de ESTO