No cabe duda que el Gran Premio de México le sienta de maravilla al volante holandés de la escudería Red Bull Racing, Max Verstappen, quien a pesar de su semblante serio, disfruta el colorido mexicano, incluso, aseguró que se siente como tal, al momento de degustar un taco al pastor, el cual, aprendió la técnica para prepararlo desde el trompo.
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El campeón del Gran Premio de México en 2017 y 2018, desea repetir el podio y el triunfo del año anterior en el Autódromo Hermanos Rodríguez, el holandés se siente orgulloso de estar como uno de los favoritos del público mexicano.
La lluvia podría ser un factor durante la carrera que se efectuará este domingo en la Ciudad México, y sobre este tema el piloto de Red Bull Racing comentó, "pienso que no importa si llueve, se puede ser competitivo, vamos a ver qué hace el clima por mí".
El joven piloto de 22 años, está feliz con la afición de México, e incluso bromeó con que le gustaría naturalizarse mexicano."Estoy pensando en nacionalizarme mexicano, disfruto mucho venir aquí, la gente es muy apasionada en la F1, apoyan a Checo Pérez, y se siente su apoyo en el estadio", señaló el holandés.
Verstappen está en el cuarto lugar del campeonato de pilotos con 212 puntos.
