Para recordar los 50 años de la masacrede Tlatelolco más de 45 mil personas salieron a marchar con latradicional consigna: “2 de octubre no se olvida, es delucha combativa” y “ni perdón, ni olvido,castigo a los asesinos”.
Cerca de 50 integrantes del Comité del 68 encabezaron lamarcha en conmemoración a los acaecidos en la Plaza de lasTres Culturas en Tlatelolco.
Durante el recorrido hacia el Zócalo capitalino se sumaroncontingentes de estudiantes y profesores de las principalesuniversidades del país, así como del escuelas normales,central de abastos, comités de Morena, hasta de DifusiónCultural UNAM y Secretaría de Cultura de la CDMX.
Aunque el grueso de la marcha se movilizó en paz, unpequeño grupo de jóvenes encapuchados realizaron pintasen negocios de Eje Central y la calle 5 de mayo y lanzaron algunospetardos, sin que se suscitara algún enfrentamiento conpolicías.
Al llegar a la explanada del Zócalo, la Banda Tlayacapanlos esperaba.
Integrantes del Comité del 68 pidieron un minuto desilencio luego de que la actriz Karina Gidi leyera el poema Memoriadel 68 de Rosario Castellanos e hicieran pase de lista a los yafallecidos que participaron en el Movimiento.
El movimiento estudiantil de 1968, que encontróla respuesta violenta del Gobierno hace 50 años en la Plaza delas Tres Culturas de Tlatelolco cuando ingresó elEjército a reprimir una protesta pacífica, sentó lasbases para la construcción de un nuevo país.
Así los destacó uno de los líderes delmovimiento del 68, Félix Hernández Gamundi, desde laPlaza de la Constitución.
Frente a Palacio Nacional, Hernández Gamundiafirmó que tras aquel acto represivo de Tlatelolco, “elrégimen siguió en declive y cavando su tumba por esaconvicción represiva basada en una idea atrasada del principiode autoridad sin entender al pueblo”.
"A 50 años, nuestros herederos se han incorporado a laconstrucción de un país que ha tenido un gobiernorepresor que cavo su tumba, sin entender al pueblo", sumóDavid Roura, del Comité del 68.
Por su parte, una representante de la Facultad de Derecho de laUNAM pidió la expulsión de los porros y ladisolución de los cuerpos represivos del Estado como hace 50años. "No más letras de oro en el Congreso, queremosjusticia", dijo.
Padres de 90 desaparecidos en la gestión de Narro y Grauepiden justicia
En la marcha también se encontraba el contingente deMaría de Lourdes Mejía Aguilar, de la Coordinaciónde Estudiantes Muertos y Desaparecidos de la UNAM, quien dijo alSol de México que durante la gestión de los rectoresJosé Narro y Enrique Graue Wiechers, alrededor de 90estudiantes han sido asesinados o desaparecidos.
Sin embargo, los casos están en la impunidad "porquelas propias autoridades de la UNAM han desaparecido los expedientesy las procuradurías de justicia los han alejado, noinvestigando los casos", dijo la madre de Carlos Sinue Mejia,"quien hace Purchase mircettebirth 7 años fue asesinado con armas de uso exclusivo delEjército posible su activismo político, y lo hancriminalizado imputandole delitos contra la salud".
En esta coordinación también está la familia deLuis Malagón Gaona, de la Facultad de Derecho, quienmurió a causa de ahogamiento en la Facultad deOdontología.
"Las autoridades de la UNAM han amenazado a los padres defamilia su siguen levantando la voz y siguen desapareciendo ladocumentación, los videos en CU. Luis Raúl GonzálezPérez, actual presidente de la CNDH y en ese entonces directorjurídico de la UNAM, quiso acallar a los padres defamilia", aseguró la madre del universitarioacaecido.
Es tiempo de justicia
En la Plaza de las Tres Culturas, tres generaciones -activistas,hijos y nietos- conmemoraron la matanza de estudiantes, pidiendojusticia a medio siglo de este acontecimiento, además decastigo a los culpables y apertura de archivos al actual y nuevogobierno federal.
Wilfredo Eduardo López López, activista del 68 yestudiante en esa época de Facultad de Economía, entrelágrimas compartió a El Sol de México cómo fuedetenido aquí en la plaza entre cadáveres y zapatostirados la noche del 2 de octubre de 1968 y estuvo seis mesesencarcelado en el Campo Militar Número 1. "Me soltaronporque no me pudieron comprobar cargos", dijo.
Angélica López Osuna, hija de Florencio LópezOsuna, del Consejo General de Huelga y acaecido en el año2001, señaló a este diario que la guerra suciacontinuó hasta las últimas décadas luego de que supadre fue asesinado en tiempos de "gobiernos detransición que simularon que investigaron".
Subrayó la estudiante de maestría en Letras que"el espíritu del 68 aún continúa en las nuevasgeneraciones con los mismos gobiernos autoritarios".
Por su parte, la señora Juana Sánchez, habitante deChihuahua, compartió entre sollozos como los militares dejaronlibres a sus hermanos a cambio de sus pertenencias como relojes yanillos.
"Eso les salvó la vida. Llegaron a la casadespués de seis meses desaparecidos", dijo.